miércoles, 18 de marzo de 2020

Hacía mucho frío - a causa de ir en ala delta y sin guantes mis manos estaban de un color muy pálido, temía que algún momento y de alguna forma se rompieran.

Pero prefería esto a tener que encontrarme con el grupo de elfos de la clase mayor.

No se como hice para escapar medio ilesa la ultima vez que me los encontré.

Ser una paria no es muy agradable y menos cuando tu raza élfica es tan estricta con la sangre.

Me duele el respirar a causa del frío, no para de salir vaho de mi boca, mi nariz y orejas rojas están rojas.

Puedo ver la copa de un gran árbol  haciéndose cada vez mas grande.

 Aun no se que hago allí no como fui capaz de aprobar el examen todos los días son un infierno.

-Sora...- es un leve susurro pero aun puedo oírlo, no son los elfos de mi clase, esa voz nunca la he escuchado, pero es raro venir de ninguna dirección - Sora... - esta dentro de mi cabeza
debes venir al santuario de la vida... - no, creo que debo estar loca, una voz la cual me habla dentro de mi cabeza  me esta llamando para que vaya  al santuario sagrado de la aldea El cual hace de quien se acerca muera instantáneamente

-No...pienso ir

-Debes ir sora

Vuelvo a negarme pero esa voz se intensifica mas y mas hasta que hace que caiga de la paravela  mi cabeza da vueltas creo que me va a explorar.

-Ve al santuario de la vida...

Me encamino hacia allí debería buscar ayuda, pero se que no me la brindarían tal y como soy y si muero creo que seria mejor para mi madre y para todos.

El santuario de la vida es un lugar sagrado donde nuestro fundador de nuestra raza nació sin necesidad de nadie.

Todo el que se atreva a entrar excepto el ultimo heredero el cual nadie sabe su existencia .

Ya la veo una piedra clavada en medio del lago carmesí sus runas de un élfica  antiguo  siguen con un amarillo brillante como la ultima vez que la vi.

Empiezo adentrarme en el lago el agua no llega a cubrirme  solo los talones.

Hay un pequeño altar con una forma de mano grabada en ella

-El lo hizo y murió y ahora lo haré yo... - acerco la mano lentamente  hacia ella, encaja perfectamente.

Oigo un temblor en todos lados veo como los cuervos huyen graznando despavoridos.

Y de repente silencio excepto una voz- bienvenido ultimo heredero

No hay comentarios:

Publicar un comentario